¿Por qué me duelen los dientes? Sensibilidad dental
A todos nos ha pasado alguna vez haber sentido una molestia en los dientes cuando estos han entrado en contacto con algo muy frío, como un hielo por ejemplo, o con algo muy caliente. Si te ha sucedido de manera puntual no es preocupante, pero es importante conocer las causas que lo provocan porque puede convertirse en un trastorno muy incómodo. Esta alteración puede perturbar la vida de las personas que lo padecen, ya que estas tienden a evitar los estímulos que la provocan y dejan de consumir alimentos y bebidas que les gustan.
Pero a nosotros, como profesionales de la salud bucodental, nos preocupa más el hecho de que los pacientes con sensibilidad dental descuidan su higiene bucal por el dolor que sufren durante el cepillado. Como consecuencia, la limpieza no se realiza adecuadamente y resulta menos eficaz, facilitando la aparición de caries y algunas patologías como gingivitis.
Algunos de los pacientes de nuestra clínica dental en el centro de Vitoria nos consultan a cerca de la sensibilidad dental. Y es que este problema afecta a más del 25% de la población adulta. Lo habitual es que se produzca por primera vez entre los 18 y los 40 años, y la sensibilidad aumenta con la edad debido al desgaste del esmalte y a la retracción de la encía propia del avance del tiempo.
¿Por qué me duelen los dientes?
La mayor parte de los casos están provocados, como hemos adelantado, por la recesión de las encías. Estas son las que protegen la dentina del diente, por lo que pierden parte de su protección y se ven más expuestas. Cuando entran en contacto con algunos elementos externos como el calor, el frío, los dulces o los ácidos, es cuando se produce el dolor.
Si la molestia se sufre ante un estímulo leve y solamente mientras dura este estímulo, lo más probable es que estés sufriendo de sensibilidad dentaria. Si además, tienes localizada la pieza afectada, la mejor opción es que consultes a tu dentista en Vitoria para que revise tu caso y busque el tratamiento más apropiado.
Existen diferentes causas que pueden desembocar en este problema:
– El cepillado con mucha fuerza provoca el desgaste del esmalte y que las encías se retraigan.
– Bruxismo. Masticar con demasiado ímpetu erosiona los dientes haciendo que pierdan parte de su protección.
– Consumir bebidas o alimentos ácidos estropea el esmalte dental.
– Algunos tratamientos dentales, como el blanqueamiento, pueden provocar sensibilidad temporal.
– Las enfermedades periodontales favorecen la retracción de las encías y como consecuencia la desprotección de las piezas.
– Algunas patologías, como hernias o anorexia, por ejemplo, provocan la secreción de ácidos en la boca que estropean el esmalte.
¿Cómo evitar el dolor en los dientes o sensibilidad dental?
Los dentistas en Vitoria no se cansan de explicarnos la importancia de una correcta higiene dental para que la salud de nuestra boca no se resienta. De cara a prevenir la sensibilidad, es primordial, además, que utilices un cepillo suave (si utilizas uno eléctrico, mejor, porque te avisará si ejerces demasiada presión) y un dentífrico que no sea muy abrasivo. A la hora del cepillado es conveniente realizar los movimientos correctos y utilizar seda dental y un colutorio específico para la sensibilidad. Es fundamental acudir cada seis meses a la clínica dental para una revisión y una profilaxis cuando te indique el especialista (si padeces algún dolor dental, con más motivo).
Otra manera de prevenir las molestias es que dejes pasar unos minutos antes de lavarte los dientes cuando hayas ingerido alimentos o bebidas ácidas para que la saliva pueda neutralizar el pH ácido y el esmalte del diente no este blando por la ingesta. Un pequeño truco: si consumes leche o queso, por ejemplo, conseguirás contrarrestar la erosión del esmalte. También puedes evitar, en la medida de lo posible comer o beber cosas ácidas. Y después de comer, evita utilizar palillos; siempre será mejor usar cepillos interproximales, ya que cuidarán mejor los dientes y las encías al estar especialmente diseñados para eso.
Si siguiendo todos estos consejos no has logrado combatir la sensibilidad, los profesionales de la clínica dental en Vitoria, pueden ayudarte con diferentes tratamientos, como la aplicación de geles desensibilizantes, cubriendo la recesión de las encías, e incluso realizando una endodoncia si fuera necesario. Confiar en tu dentista es la mejor manera de conseguir una sonrisa sana durante muchos años.